Caminar sobre los dedos de los pies o también llamado “marchar de puntillas”, es muy frecuente en los niños(as) que recién están comenzando a caminar. No todos los niños(as) pasan por esta etapa y los que sí, dejan de hacerlo al crecer, alrededor de los 2 o 3 años.
Cuando siguen marchando de puntillas después de los primeros años, por lo general, es por costumbre, sin representar algún problema. A esto se le conoce como Marcha en Puntillas Idiopática, es decir que se desconoce lo que la provoca. Sin embargo, en cualquier caso debe consultarse al pediatra para que realice una exploración del pie y descartar cualquier posible afectación.
Algunas de las razones por las que el bebé camina en puntillas pueden ser:
- Uso de andaderas o saltadores. Estos acostumbran al niño(a) a mantener contacto con el suelo solo con la parte delantera del pie.
- Conservar el reflejo de Babinski. Un reflejo primario en los bebés, en el cual al estimular el borde externo del pie los dedos se abren como abanico. Este reflejo desaparece cuando el bebé se arrastra y gatea, por lo que si se ha saltado esta fase puede que aun conserve el reflejo.
- Problemas de integración sensorial. Teniendo una extrema sensibilidad en la planta de los pies, por lo que rechazan el contacto del pie con el suelo.
LFT. Ana Karen Molina Carrazco
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