REHABILITACIÓN EN EL SINDROME DE DOWN

El Síndrome de Down es una alteración genética muy frecuente, es causado por la triplicación del cromosoma 21, de forma completa o parcial, por eso, también se conoce como trisomía del par 21. Las personas con síndrome de Down tienen rasgos físicos y cognitivos comunes, así como la predisposición a ciertas patologías cardiacas, endocrinas, digestivas, problemas de visión, entre otras.

Dentro de estos rasgos pueden destacar:

  1. La hipotonía, es decir, un tono muscular bajo.
  2. Disminución de la fuerza.
  3. Hipermovilidad articular.
  4. Predisposición a deformidades articulares: escoliosis, genu varo o valgo y pie plano o varo.

En estos casos, la rehabilitación desempeña un papel muy importante para el desarrollo y es necesario comenzar a trabajar con los niños desde que son bebés, para ayudar a disminuir el retraso madurativo que se presenta. Todo esto es a través de programas de atención temprana, en los cuales, a través de diferentes actividades y ejercicios, ayudan a aumentar el tono muscular para de esta forma facilitar el aumento de fuerza. Normalmente asociamos una adecuada estimulación cuando los niños se sientan por sí mismos, gatean, caminan, saltan y corren, pero esto no es lo único, también la estimulación sensorial es una parte importante de la rehabilitación, la cual se puede abordar de muchísimas formas.