“Red flags”: Señales de alerta en una relación
A propósito del mes de febrero, el conocido mes del “amor y la amistad”, quiero compartir sobre un término que últimamente se ha popularizado y utilizado como signos o señales de alerta en una relación: las llamadas “red flags” o “banderas rojas”. Estas se utilizan para señalar ciertos comportamientos de aquellos con quienes tenemos un vínculo afectivo, ya sea de pareja o de amistad, y es importante identificar y valorar cómo nos sentimos al respecto.
Entre otras, algunas señales que debemos identificar son la falta de responsabilidad afectiva, es decir, aquel comportamiento de pareja o amigo(a) que genera inestabilidad o ambigüedad ante tu persona. Las personas sin responsabilidad afectiva no comunican claramente sus deseos o aspiraciones de la relación, tienen poco compromiso tanto contigo como con ellos mismos y esto se refleja en que un día está muy presente y pendiente de ti y de repente desaparece por una semana; son aquellas personas con las que no sabes si puedes contar o no porque no logran transmitirte seguridad ni complicidad.
No escucha ni valora tu opinión. Cualquier relación se compone de dos o más personas y, por ende, todos los involucrados merecen la misma importancia y respeto. Si tu compañero(a) o amigo(a) resta importancia a tu opinión o ni siquiera la solicita, principalmente tratándose de temas importantes, es posible que tenga dificultad para empatizar contigo realmente y únicamente se ocupa de él (ella) y sus necesidades.
Presta poca o nula atención a tus gustos, sueños y aficiones. Ten claro que quien es o pretende ser tu compañero(a) de vida querrá saber todo de ti, en el buen sentido, puesto que conocer tus gustos, sueños, aficiones, pasatiempos o anécdotas favoritas estrechará el vínculo entre ambos, e incluso, generará actividades que puedan realizar juntos. Si a tu compañero(a) o amigo(a) no le interesa para nada qué te gusta hacer o cuáles son tus sueños o metas futuras, pregúntate si realmente merece la pena compartirlo con él (ella).
Existen un sin fin de señales de alerta que nos indican a qué debemos prestar un poco más de atención al momento de tener una relación con los demás y, sin duda, un parámetro que debemos tomar en cuenta es aquel sentimiento de incomodidad o desvalorización hacia tu persona, las ahora llamadas “red flags”. Pregúntate: Mis relaciones, ¿me aportan? ¿Me inspiran a crecer?, ¿Me hacen sentir escuchado, querido?… Recuerda que el compartir tu tiempo y vivencias es lo más valioso que tienes, asegúrate de compartirlo con las personas correctas.