El 3 de diciembre de cada año celebramos el día internacional de las personas con discapacidad, declarado por la ONU en 1922. Su finalidad es visibilizar la situación que viven las personas con discapacidad en el mundo y así promover su bienestar y participación social. Con el paso de los años se han realizado muchos esfuerzos, y de ellos han surgido organizaciones, asociaciones e instituciones que buscan dignificar su vida. Sin embargo, esto no ha sido suficiente, por lo que es necesario seguir trabajando arduamente por encontrar la inclusión social que merecen.
En ese sentido, la agenda 2030 tiene como lema “No dejar a nadie atrás”, y se logra a través de algunos de los objetivos del desarrollo sostenible, inclusivo e igualitario, que ven a las personas con discapacidad como agentes de cambio. Esto promueve su empoderamiento desde todas las esferas (sociales, políticas y económicas).
De acuerdo con lo anterior, es importante voltear a ver a la primera infancia con discapacidad y reconocer que es necesario intervenir en su desarrollo psicoemocional, psicomotor, neurológico y físico. Así, en un futuro tendrán mejores oportunidades y por tanto una mejor calidad de vida. Podrán ser personas activas en una sociedad que promueva sus derechos y poco a poco siga cambiando la perspectiva hacia la discapacidad.
¿Cómo puedo ayudar?
- Si eres padre o madre de familia ten paciencia y amor hacia tu hijo, pon atención a su alimentación, investiga su condición y lucha por sus derechos.
- Los profesionales pueden investigar cómo beneficiar a las personas con discapacidad desde su trinchera. Por ejemplo, un arquitecto debe buscar que sus diseños sean inclusivos, una maestra tiene que buscar estrategias de aprendizaje y de inclusión, etc.
- La sociedad en general debemos reconocer el trato que merecen las personas con discapacidad y dirigirnos con respeto, sin condescendencia ni paternalismo, tratándolos con naturalidad.
Construir una sociedad inclusiva no solo es responsabilidad de los gobiernos si no de la sociedad en general. Este día internacional es un buen momento para reflexionar cómo podemos mejorar las condiciones de vida de las personas con discapacidad. Si se te complica un poco visualizarlo, recuerda: la discapacidad no implica incapacidad. Por esto hay que tener en cuenta que las personas con discapacidad tienen derecho al mismo trato que el de cualquier persona. Si comenzamos por aquí, haremos una diferencia significativa.
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