El autismo es un trastorno que afecta gravemente a los individuos que lo presentan, generándole problemas de integración social y ensimismamiento.
Debido a esto, su desarrollo normal se ve condicionado y afecta a los roles que deben de cumplir a lo largo de su vida diaria.
Actualmente el autismo tiene un gran interés a nivel mundial y cada vez se conoce más del uso de animales con fines terapéuticos para tratar este trastorno.
Un ejemplo es la equitación terapéutica, la cual influye positivamente en el desarrollo de la comunicación y de la interacción social de las personas con autismo y otros trastornos del neurodesarrollo.
¿Qué es la equinoterapia?
La equinoterapia consiste en utilizar el movimiento rítmico del paso del caballo para crear una terapia de relajación y trasmitir al jinete una serie de movimientos producto del movimiento del animal.
Con esta terapia encontraremos beneficios en algunas áreas como lo son:
- Beneficios a nivel físico: Permite desarrollar fuerza y tono muscular debido a los ajustes que el niño debe de estar realizando constantemente para mantener la postura. Además, controlar las riendas le ayuda a desarrollar la coordinación entre el lado derecho e izquierdo del cuerpo.
- Beneficios sensoriales: Al montar a caballo estimula su sistema vestibular con los cambios de dirección, velocidad y las inclinaciones que se pueden realizar en un paseo. El tacto del pelaje del caballo estimula la piel del niño. Además, los sonidos y olores del caballo, así como el ambiente en el que se realiza el paseo, ayudan a su estimulación.
- Vínculo emocional: El cuidado de un caballo ayuda a que el niño aprenda
sobre los sentimientos de otros seres vivos y la responsabilidad de cuidar a otro. Este vínculo ayudará al niño con autismo a desarrollar habilidades sociales y de comunicación en todas las áreas de su vida.
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