REFLEJO PALMAR

Desde el momento del nacimiento, los bebés cuentan con ciertas respuestas involuntarias que aseguran su supervivencia, estas respuestas se conocen como reflejos del recién nacido, los cuales van desapareciendo con el paso del tiempo.

¿Alguna vez has notado cómo un bebé toma tu dedo con mucha fuerza y parece no quererlo soltar? Bueno, esto es debido al reflejo de prensión palmar, el cual se observa cuando colocamos un objeto sobre la palma del bebé y este lo coge y aprieta con su manita de tal manera que incluso podríamos levantarlo hasta ponerle de pie sin que se soltara, este forma parte de los reflejos del recién nacido.

Este reflejo desaparece en poco tiempo, en promedio alrededor de los 6 meses, y da paso a una nueva conducta que se adquiere a medida que se va desarrollando el cerebro del bebé. Es gracias a esto que el niño comienza a adquirir la coordinación y habilidad para agarrar los objetos a voluntad. Es debido a todo este proceso por el que él bebé va pasando lo que permitirá que en un futuro desarrolle la habilidad de tomar objetos a voluntad, manipularlos y soltarlos a voluntad propia.

Cuando el niño ha llegado a este punto ha experimentado un continuo aprendizaje, el cual le ha permitido continuar su desarrollo. El desarrollo de su capacidad manual es de suma importancia, ya que es através de sus manos que el niño logra manipular el mundo a su alrededor.